Último adiós a Joan Rivers


''Cuando yo muera (y sí, Melissa, ese día llegará; y sí, Melissa, todo está a tu nombre) quiero que mi funeral sea un gran espectáculo con luces, cámara y acción. Quiero un servicio de catering. Quiero paparazzis. ¡Quiero periodistas haciendo una escena!. Quiero que sea como Hollywood en todo sentido. No quiero a un rabino paseando por el lugar. Quiero que Meryl Streep llore en 5 diferentes acentos. No quiero un elogio. Quiero que Bobby Vinton agarre mi cabeza y cante 'Mr. Lonely'''.

El pasado jueves 4, el mundo de la comedia y la moda quedó en duelo por la pérdida de una maravillosa mujer que no tenía vergüenza de decir lo que pensaba. Joan Rivers falleció a la 1:17 pm tras un paro cardiorrespiratorio durante una cirugía a las cuerdas vocales.

Como vimos, la que iba dando noticias era Melissa, su hija, mediante el Facebook de esta Fashion Police. Ayer, domingo 7, se llevó a cabo el último adiós de la icónica Joan Rivers. Se realizó en una sinagoga en Manhattan a las 11:00 am. La ceremonia comenzó con el coro gay New York City Gay Men's Chorus, que  incluyó canciones del actor Hugh Jackman y de la actriz de Broadway Audra  McDonald. Todo muy emotivo.

Personajes de la televisión, comediantes, diseñadores de moda, amigos y fans acudieron a dicho evento. La reservada lista la encabeza la actriz Sarah Jessica Parker, Whoopi Goldberg, la periodista Barbara Walters, los diseñadores Carolina Herrera y Michael Kors, y el empresario Donald Trump, además de su amiga y compañera de trabajo en el programa Fashion PoliceKelly Osbourne.

Sin duda el momento más emotivo fue la despedida de Melissa Rivers, su hija, y Cooper, su hijo de 13 años. Ella besó el ataúd donde descansaba su madre antes de partir al Garden State, donde fue cremada.

Estoy muy seguro que su partida deja muchos corazones tristes, su casa E!, su programa Fashion Police y sin duda las bromas un poco subidas de tono a los hijos de Angelina Jolie y las piernas “fáciles de abrir” de Kristen Stewar.

''Quiero lucir hermosa, mejor en la muerte de lo que luzco en vida. Quiero ser enterrada en un vestido Valentino y quiero que Harry Winston me haga una etiqueta para los pies. Y quiero un ventilador de manera que, incluso en el ataúd, mi cabello sople como el de Beyoncé''.

Hasta siempre Joan.
















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